lunes, 30 de noviembre de 2015

Dieta equilibrada y variada

Los niños y niñas deben de llevar una dieta equilibrada y variada para que no tengan ningún déficit de vitaminas y minerales esenciales para su buen desarrollo, mantenimiento y buen funcionamiento del organismo. Alrededor de los doce meses de edad, el ser humano se encuentra preparado físicamente para digerir adecuadamente la mayoría de los alimentos, siempre que se hayan cocinado de forma adecuada para su edad. Cuanto antes acostumbremos a los niños a comer de todo, más fácil será nuestra misión de conseguir que en el futuro sigan una alimentación equilibrada y sana.

La lonchera no reemplaza ningún tiempo de comida



La lonchera de tu hijo o hija tiene como función poder darle energía y nutrientes indispensables para su organismo para mantener la energía suficiente en la escuela y poder aguantar hasta la hora de la comida.
Hay que tener claro que de ninguna manera la lonchera sirve para reemplazar ninguna de las comidas principales como el desayuno o el almuerzo. La lonchera es una pequeña merienda lo ideal sería que no pasara de las 300 calorías (250-300 calorías). La lonchera es sumamente importante ya que los niños como están en actividad constante necesitan energía varias veces al día (en pequeñas porciones; la capacidad gástrica del niño es mucho menor que la de los adultos).

La clave o secreto está en poder darles alimentos nutritivos pero que al mismo tiempo les gusten. 

El desayuno es el tiempo de comida más importante

El desayuno es el tiempo de comida más importante del día para que un niño pueda desarrollarse y poner más atención en la escuela. Este debe de abarcar el 30% del consumo total de comida. Cuando los niños no desayunan bien no tienen la energía y la vitalidad necesarias para afrontar el esfuerzo físico e intelectual que les exigen las actividades escolares, ademas, un desayuno no adecuado hará que los niños sientan a medida la necesidad  de un gran aporte energético, que seguramente podrán encontrar en productos de alto contenido en azúcar y ácidos grasos, como 
puede ser la bollería industrial y otros productos similares que están 
directamente relacionados con el crecimiento de los índices de sobrepeso y obesidad durante la infancia, por su alto contenido calórico. 

martes, 24 de noviembre de 2015

¿Existe relación entre la nutrición y la educación?


Diversos estudios a nivel internacional aportan evidencia sustancial de como la desnutrición en los primeros años de vida afecta el crecimiento del cerebro, el sistema inmunológico, el desarrollo intelectual y socioemocional en los niños y niñas pequeños lo cual tiene repercusión en la adolescencia y la edad adulta.

Estas investigaciones cobran significativa importancia durante la escolaridad, ya que los problemas nutricionales afectan especialmente los estratos socioeconómicos más deprimidos de la sociedad, en la edad escolar, esto se traduce en altos índices de deserción escolar, problemas de aprendizaje y bajo ingreso a la educación superior, lo cual limita el desarrollo de los pueblos. Por lo tanto se alcanzaría un claro beneficio económico e  incremento de la productividad del adulto, con la implantación de políticas gubernamentales exitosas al prevenir la desnutrición infantil.

Dentro de estos trabajos se destaca la investigación realizada por Leiva y Col (2001), quienes estudiaron el impacto del estado nutricional en el desarrollo cerebral, inteligencia y rendimiento escolar, en el marco de un enfoque multifactorial de 200 escolares Chilenos pobres egresados de la educación media, de edades de 17.5 ± 0.8  y en donde los procesos físicos e intelectuales estaba consolidados. El desarrollo cerebral fue evaluado por resonancia magnética por imágenes (RMI), el coeficiente intelectual (CI) por medio del test de Weschelr-R, el cual correlacionó alta y significativamente con el Test de Matrices Progresivas de Raven validado para la población chilena. El rendimiento escolar se determinó a través de las baterías de pruebas de castellano y matemática.

Los resultados mostraron que los escolares con indicadores de desnutrición presentaron un volumen encefálico de aproximadamente 200cc y 100cc menos, en comparación a los escolares no desnutridos, tanto en el sexo masculino, como femenino, respectivamente y que el rendimiento escolar está condicionado significativamente por factores genéticos y ambientales. Por otra parte el CI de los escolares desnutridos era de 25 puntos más bajo y su rendimiento escolar equivalente a la tercera parte, del presentado por los escolares no desnutridos. Otros datos revelaron como el CI del alumno, el CI de la madre, el CI del padre, el peso del nacimiento, la talla del nacimiento, y la desnutrición acaecida en los primeros años de vida, fueron factores determinantes en el rendimiento escolar, siendo el CI del alumno la variable de mayor contribución al explicar la varianza del rendimiento escolar en ambos sexos.

Lo anterior conduce reflexionar sobre la importancia de la promoción de hábitos saludables de alimentación desde la infancia y su repercusión en el desarrollo de los aspectos cognitivos, afectivos, emocionales y motores de los niños y las niñas, así como las desventajas y limitaciones en su desarrollo futuro. Dentro de estos escenarios no solo la disponibilidad de alimentos y suministro de una dieta adecuada son los aspectos determinantes, también influyen de manera determinante el ambiente escolar, las estrategias empleadas por el maestro y su formación profesional en el tema alimentario y nutricional, la preparación de los alimentos, el patrón alimentario de los padres, aspectos socioeconómicos del grupo familiar y la cultura de la comunidad donde se desenvuelve. También es relevante el desarrollo de políticas gubernamentales de apoyo a los canales de comunicación orientados al fomento de mensajes positivos sobre la promoción de hábitos de alimentación saludables desde la etapa de gestación.

Guía de alimentación del escolar





 
Revista Fucsia

Alimentación sana para niños

¿Cómo debe ser la nutrición de un niño desde los 2 hasta los 12 años? Revista Fucsia.com consultó a un experto y esto fue lo que nos dijo.

En la niñez es fundamental alimentarse saludablemente para crear buenos hábitos de vida. Sin embargo, muchas veces esto no sucede en gran medida por la invasión de las comidas rápidas lo que está lejos de una alimentación balanceada. 
Consultarle a la Dra. Luz Karime Halaby, nutricionista graduada en la Pontificia Universidad Javeriana, todo lo referente a la alimentación en la niñez.

¿Qué alimentos son los que más ayudan a un niño en su desarrollo? 
Los niños necesitan una alimentación balanceada en todos los aspectos. No puede faltar la proteína que es importantísima para que los músculos se desarrollen y puedan crecer fuertes y saludables. Es importante además implementar calcio para que los huesos estén fuertes. Por otro lado es clave tener claro que las porciones de alimentos deben ser menores, más no mínimas, que las consumidas por un adulto.
Básicamente el niño debe comer de todo, harinas, dulces, frutas y verduras, a no ser que tenga alguna alergia o intolerancia, lo cual debe ser tratado con más profundidad. 

¿Qué alimentos son ideales para su desarrollo cerebral? 
Alimentos que tengan fósforo como las carnes, el pollo y el pescado. Casi todos los alimentos tienen minerales que ayudan al desarrollo cerebral pero las carnes contienen una mayor cantidad de fósforo.

¿Qué cantidad de lácteos se les debe proporcionar?
La cantidad real de lácteos depende de las necesidades propias de cada niño. En ocasiones habituales se les proporciona un lácteo al desayuno y uno a cualquier otra hora del día. Pero es importante combinarlos con otros alimentos como las frutas, las harinas y las proteínas.

¿Qué cantidad de líquidos deben consumir?
El líquido se lo pide el cuerpo. Los líquidos eliminan impurezas y si el niño pide es porque tiene sed. También se debe contar con el agua de los alimentos y de los jugos al consumo diario.

¿Es cierto que: más rozagantes mejor alimentados?

No. Hay casos de desnutrición en que el niño esta gordo. Para esto hay que hacer un estudio específico de cada caso. 
 
¿Cómo alimentar a un niño con sobrepeso? 
Debe manejarse primero una reducción de consumo en los niños que comen muchos dulces o consumen alimentos en exceso e inapropiados. Usualmente el sobrepeso es el resultado de malos hábitos de alimentación.
Por esto, es importante que se les proporcione de todo pero a su medida, no se les puede decir que no vuelvan a consumir nunca un alimento específico sino enseñarles como alimentarse para crear hábitos apropiados de vida.

¿Cuándo un niño no quiere comer, ¿qué se debe hacer?
Desde los 6 meses hasta el año el niño debe consumir todo licuado. Después de eso se les empiezan a dar comidas sólidas, sin embargo, hay niños que no aceptan algunos alimentos como la sopa o las verduras. Cuando pasa esto es importante servirle de diferentes maneras la comida para que ellos la vayan aceptando a medida que la van consumiendo. También hay que tener en cuenta las texturas y el color de los alimentos. Servirlo de una manera agradable hará que el niño coma con más facilidad los alimentos.